Recursos para preparar la masticación
La ejercitación de la musculatura masticatoria es fundamental en muchos casos que presentan desequilibrios miofuncionales orofaciales: pacientes respiradores orales, con alteraciones deglutorias, dificultades masticatorias, etc.
La destacada importancia de la función masticatoria para el crecimiento de las estructuras craneofaciales así como para el desarrollo del habla también son aspectos bien conocidos por la mayoría de nosotros.
Teniendo en cuenta todo esto y siendo conscientes del exceso de dietas blandas presentes hoy en día, que requieren de menos esfuerzo y dedicación, se hace aún más imprescindible tal entreno muscular junto al establecimiento de una dieta sólida y dura.
Para enriquecer vuestra caja de herramientas terapéuticas, os presentamos algunos de los mejores recursos disponibles para entrenar la función masticatoria:
Bloques de mordida: Set de 3 elementos de distintos grosores diseñados para aumentar el tono muscular de maseteros y temporales, propiciar la apertura bucal, incidir en la sincronía de los movimientos mandibulares bilaterales y balanceados, estabilizar la mandíbula, etc. Estos bloques de mordida son firmes, para ofrecer una buena resistencia durante los ejercicios, sin ser del todo rígidos para resultar agradables y suaves con el contacto dental. Además, sus rugosidades aportan un estímulo extra a nivel propioceptivo y sensorial.
Chewy tubes: Mordedor, en forma de T, de fácil agarre para su utilización. Cada modelo, de características distintas, permiten ejercitar la musculatura masticatoria desde edades tempranas hasta la edad adulta. El Chewytube verde, con resaltes, despierta la sensibilidad oral. Los otros modelos, vacíos en su interior, permiten la introducción de alimentos para facilitar el paso a la dieta sólida.
Mordedores lisos y/o con texturas: Mordedores, en forma de P, tubulares o planos, permiten estimular la propiocepción y sensibilidad intraoral, fortalecer la musculatura, entrenar la masticación de manera previa a la introducción de los alimentos, etc. Muy recomendable para calmar en momentos de erupción dental y para la deshabituación de hábitos lesivos masticatorios tales como la onicofágia, morder objetos/ropa, apretar dientes, …